Crónica de Carles Duran
Desisto de la ARTEC Marató!!!
Ayer volví por tercer o cuarto año consecutivo a la Marxa d'Or de St. Llorenç de Savall. Tres recorridos: 15, 30 y 66 kms. Cómo no, me metí en el fregao de los 66 kms pues es una marcha que siempre me ha ido bien. Por segundo año consecutivo estaba en el circuito de Fondo de la FCC con lo que las trialeras debían ser mínimas.
Después de levantarme en horario de ir al trabajo, llego a St. Llorenç en 45 minutos, con el tiempo suficiente para recoger el dorsal, tomar café con coca y montar-engrasar la bici. Temperatura ambiental: 8.5ºC. Pantalón pirata, manguitos y chaleco windstopper.
En la salida, poca gente pero en ningún momento fui solo. El recorrido de esta marcha es sorprendente por la cantidad de pistas que hay por la zona. Casi nunca se repite recorrido pero el del domingo fue brutal. Empecé muy bien, con ritmo y siguiendo a los grupos que poco a poco fui perdiendo.
En el km. 23 el cuentakilómetros decide cojer la baja y se para. ¡¡¡Que cabrón!!! No se cuánto me queda. Al llegar a Monistrol nos dicen en el control que estamos en el km. 33, o sea que faltan 33 más. Buff... y encima ahora toca subir para coronar el puerto de Lligabosses por pista, con alguna rampa que quita el hipo. Al coronar, se baja por pista rocosa hasta el desvío de una trialera de al menos un kilómetro con una zona ciclable y otras muy chungas.
Al final, le pregunto a uno que cuánto queda y me dice que 13 kms. En ese momento ya me arrastro como un gusano pero se me aparece la virgen: una rubia delgada que había ido al mismo ritmo que yo. Iba con su co-equipier a un ritmo que ya me iba bien así que, como un autómata, le sigo la rueda hasta coronar la última subida en la que los rebaso.
En un momento miro hacia atrás para ver si me siguen y así hacerles un relevo hasta llegar a meta. Allí oigo un comentario que me supo mal. Va la rubia y dice: "mira como son los tíos: ese ha mirado para atrás para ver si me quedaba".
Me supo mal el comentario, así que, antes de entrar en el pueblo, aflojo para que pase ella y su compañero. En el callejeo por el pueblo la tía iba mirando para atrás a ver si le atacaba... ¡¡¡con lo petao que iba yo!!! En meta resulta que ella era la primera fémina en llegar.
Resumiendo: lo pasé muy mal por falta de fondo, así que domingo que viene salida con el Club para celebrar el aniversario y dejar las gestas heroicas para cuando haya entrenado.
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