Crónica de Carles Duran
Menuda marcha hicimos los del Provençalenc en Cervera. ¡¡¡Para grabarla en video!!!
Aparte del madrugón -salida de casa Ruben a las 6:00, yo me levanté a les 4:45-, con llegada a Cervera sobre las 7:20, recogida de dorsales y nos vestimos cada uno con sus cosas y sus manías. La más espectacular la del Garrido: ¡una crema Tiger calentadora recién llegada desde China!
Junto a Garrido, Rubén y yo, se nos une desde Sabadell el Xavi Vilanova. Ya en la salida el Xavi pregunta cuál es la táctica, así que le digo que se trata de no perder el grupo sino el llano va a ser muy duro hacerlo sólo.
Este año el recorrido tenía un pequeño cambio que a la postre resultó muy positivo. En vez de ir hacia la Panadella, antes de subirla, a los de la larga nos desvían hacia el Alt de Talavera, en una carretera que parecía de las Ardenas Belgas: poco tráfico, todo verde-verde-verde y con muchos molinos, de los de energía eólica, nada de molinos clásicos. En esta subida hay que ponerse el mono de trabajo para evitar perder el ritmo ya que estamos en el segundo pelotón y no se puede flaquear.
Junto con Rubén y lo Garri subimos aguantando el ritmo y nos damos cuenta que estamos yendo muy pero que muy bien. Xavi se corta al empezar la subida. Garrido y un servidor lo subimos a plato, aunque yo lo quito casi al final para evitar un calentón. Cuando falta poco para coronar y en un falso llano me pongo a tirar del pelotón y mirar de dejar gente cortada, con el objetivo de que si a lo largo de la marcha me quedo tirado asegurarme que por detrás vendrá gente, jaja.
Coronamos y bajamos a tumba abierta hasta la Panadella y desde allí descenso hasta el desvio de Alt de Rubió, donde el Provençalenc pone su ritmo de carrera. Nos teníais que ver a los tres CCPeros en fila de a tres haciendo un tapón para que nadie nos pasara. ¡¡¡Impresionante!!!
Casi coronado adelantamos a Blanca Trenas que hacía la corta e iba un poco justa. Arriba montamos una grupeta espectacular con mucha gente y junto con Xavi Òdena del Montjuïc, rodando a tope hasta la subida al Alt de Santuari de Pinós (pendiente máxima de 18%). Ahí lo paso mal y junto con Rubén nos quedamos para subir el último kilómetro tranquilamente ya que arriba está el avituallamiento clave (km 92). Allí nos agrupamos con lo Garri que nos sacó un par de minutos. ¡¡¡Qué fuerte está!!!
Arriba, comemos, bebemos y meamos. Enfilamos el descenso y el puertecillo pestoso de 12 kms. lo evitamos con una variante nueva dónde en un grupo de 10 ciclistas vamos tirando hasta ir pillando gente y hacer un grupo de unos 40 dónde sólo tirábamos cuatro. Así que me doy la vuelta y grito: "el viento no muerde". Ahí más de uno se siente aludido y pasa a relevar. ¡¡¡Vamos a muerte!!! Era de esos días en que uno va sin cadena, tirando cuando quería y sin sacar el plato excepto en las subidas duras.
Los últimos 30 kms este año no se nos hacen tan duros y llegamos a meta tirando a tope para evitar que los nubarrones descargaran encima nuestro (había que verlos). De hecho, a Xavi Vilanova le cayó agua y granizo en la zona de Guissona.
Al final objetivo cumplido: bajar de 5:30 haciendo 5:24 lo Garri y yo mientras que Rubén hizo 5:30. Hicimos una media de 31 kms/h y es que íbamos sin cadena. Vaya día.
En meta comida, ducha caliente, etc... esperando al Xavi que hizo sobre 6:20. Ya le dije que la táctica era aguantar al grupo pero no me hizo caso.
Bueno, allí en meta y mientras llovía, fotos con Blanca y Jordi, tertulia con Xavi Òdena, Tigero y otros conocidos. Un muy buen día de ciclismo. Y a la vuelta, para redondear, cortado de rigor en la mítica Panadella.
2 comentarios:
Os veo fuertes canallas.
A ver si en remences hay grupeta
saludos
Yo creo que sí... pero nos tendrás que esperar un poquito, jejeje.
La siguiente cita será mañana sábado en la brevet 300 LoGarri y servidor.
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